VOIVOD (CAN) – Synchro anarchy, 2022
Con casi cuarenta años a sus espaldas, la banda canadiense VOIVOD nos regala un nuevo catálogo de su peculiar forma de entender (y ejecutar) el metal y que les ha hecho mundialmente conocidos. Si bien en estas cuatro décadas la formación ha pasado por etapas distintas, con algunos altibajos, es en pleno año 2022 cuando sorprendentemente están llegando a un mayor público.
En el año 2013 la banda reapareció con Target Earth y desde entonces han ido ascendiendo sin pausa hasta recobrar el aura de la gran banda que otrora habían sido. Con un nuevo guitarrista que emulaba a la perfección la técnica y principal característica del sonido de VOIVOD, el carismático vocalista Denis “Snake” Bélager y uno de los fundadores, el batería y creador de todo el arte y concepto, Michel “Away” Langevin, se arremangaron y se dedicaron en cuerpo y alma a recobrar el libro de estilo de los VOIVOD de discos que hoy son clásicos del metal como Killing technology, Dimension hatröss y Nothingface. Es hora pues de hablar de esta nueva placa, Synchro anarchy, que viene presentada con otra obra de arte de Langevin que no deja lugar a dudas que VOIVOD siguen inmersos en su particular universo paralelo, allí donde la guerra nuclear no cesa y las máquinas se han vuelto inteligentemente asesinas.
VOIVOD siempre ha sido una banda que en cada uno de sus discos mostraba una evolución considerable sin dejar de lado su característico estilo derivado de una forma de tocar la guitarra muy particular a cargo del gran Denis D´Amour. Hoy en día son muchas las formaciones que desde parámetros thrash metal juegan con disonancias, acordes atonales y toda esa clase de virguerías. Todo este tipo de cosas son mucho más apreciadas y comprensibles que en los discos clásicos de VOIVOD y quizás de ahí derive que esta nueva etapa esté siendo muy buena para la banda en términos de popularidad.
Pero por fin parece que los canadienses han decidido dejar de explorar y se han acomodado en el campo sembrado con Target earth, que mejoraron con The wake y que pulen mucho más todavía en este Synchro anarchy. Esta es sin duda la etapa en la que menos evolución ha habido, pero por el contrario también son los discos mejor producidos y que tienen un sonido que engrandece más si cabe su particular metal progresivo. Al igual que los dos anteriores, Synchro anarchy se centra casi en exclusiva en el excelso trabajo del guitarrista Daniel Mongrain, una verdadera echada por fuera en cada una de las notas que ejecuta. Mirando por el retrovisor el recetario que D´Amour dejó en herencia, Mongrain se explaya a gusto y se le siente más cómodo que nuca antes en ese incesante ir y venir de quiebros y requiebros que acaban forjando esa atmósfera post apocalíptica que nace de la cabeza de Langevin. Este último también destaca, lo que no es novedad, con su jazzística forma de tocar la batería y la verdad es que ellos dos solos se montan tres cuartas partes del álbum. Snake nunca ha sido un cantante al uso, ni destaca por su técnica vocal, pero su atípica forma de «narrar» las letras también ayuda a aumentar esa sensación de viaje hacia otra dimensión que persigue la banda en cada uno de sus discos. La música de VOIVOD no es fácil de asimilar y en este disco lo demuestran una vez más, aunque si se le da una oportunidad la experiencia sónica está más que asegurada.
Otro aspecto que podemos destacar de Synchro anarchy y que también es común a los dos discos anteriores es que no hay una gran diferencia entre unos temas y otros. Sí que hay numerosos cambios de ritmo y pasajes variopintos en cada uno de los surcos, pero todo está tan unificado en una ambientación perfectamente hilada, que desde los primeros acordes de “Paranormalium” hasta el último de “Memory failure” pareciera que estuviésemos escuchando un solo tema de cuarenta y ocho minutos. Sí, estarás pensando que lo que estoy diciendo es que el disco ha de ser un plomo, pero yo prefiero entonces aclararte que más bien es sumamente coherente con lo que la banda persigue y lo suficientemente técnico como para pasarte horas buscándole todas las tuercas a esta máquina asesina. Synchro anarchy es divertido si te gusta buscar detalles en sucesivas escuchas, es plomizo e incluso desquiciante si no tienes un mínimo de paciencia, es una obra maestra si vienes de mamar metal progresivo desde que eres crio y es VOIVOD si les llevas escuchando desde los fustigadores días de War and pain.