STEELHORSE – Burgos – 03/04/10

Headbanging, riffs atronadores y mucho, mucho HEAVY METAL. Eso es STEELHORSE. Una autentica bestia capaz de hacerte vibrar de una forma brutal. Un directo contundente, cañero, con un sonido muy decente, con unos músicos de alucinar y con un saber estar y una clase, digna de los mas grandes. ¿Estáis preparados? Pues adelante. ¡Esto es STEELHORSE!

Algo más de las once y media eran cuando llegamos al Plaza Nueva, justitos con el horario estipulado, que, como vimos con el pasar de los minutos, se demoró un poco el inicio del concierto. Solo STEELHORSE, solo una banda, pero que banda. En Inglaterra hay dos bandas que ahora mismo se están, literalmente, tirando de los pelos, temiendo por su hegemonía mundial en lo más alto del templo del Metal, Judas Priest y Iron Maiden. Quizás exagere, pero en cuanto lo escuchéis, alucinareis con su sonido y, mucho más, con su directo. Apartareis por una buena temporada discos como British Steel ó Live Alter Death para dejarle ese hueco en vuestro Hall Of Fame a su Wild Power. Como muy bien dijo mi compañero Rubén en la crítica de su disco: «Si buscas sensaciones nuevas o experimentos raros», este no es tu grupo. Bebe de lo más clásico. Ritmos muy ochenteros, una voz al más puro estilo Halford, y unos temas que te enamoraran desde el primer instante. Muchas influencias, pero ese toque de originalidad que os engatusara.

Pero vayamos ya al tema que me corresponde. Como os decía, con cierto retraso (casi una hora), sobre las doce y media comenzaban su actuación los madrileños. Un inicio muy maideniano nos indicaba que se trataba de Sons Of Fire, con la que ya nos dejaron de piedra a los pocos que allí nos congregamos (sobre las 25-30 personas), pero de piedra por unos escasos segundos, ya que no tardó en llegar el primer solo de Willy, para que todo dios comenzara a agitar su melena cual ventilador, para refrescar la acalorada sala. Un autentico trallazo al que le siguió Run To Survive, que con ese agudo estratosférico de guitarra y los primeros golpes de Rubén a la batería, ya causaron el mismo efecto que la anterior. Menos mal que nuestros pobres cuellos están ya bien curtidos en estas lindes.

Siguiendo el orden del disco, era el turno de Burning Soul, con ese inicio más pesado a la guitarra, secundado por el bajo de Ángel, dandonos un poco de tregua con este tema mas sosegado. Tanta caña para empezar… ¡Eso si! El solo que se curro Willy, de verdad, no tiene adjetivos para calificarlo. Se me ocurren grandioso, espectacular, apoteósico, más heavy que una lluvia de hachas,… Disfrutad del disco, y calificarlo vosotros mismos. Ahora llegaba Night Terrors que, sin que fuera la más coreada y animada, personalmente me sorprendió gratamente lo bien que fue ejecutada. Esos cambios de ritmo a mitad de tema, consiguieron que el tema me dijera mucho más de lo que en un principio esperaba.

Rapid Fire fue, probablemente, la que pasara más por alto de todo el setlist. Pero el impresionante ritmo que llevábamos, volvió con Nemesis. Jorge descendió por las escaleras para disfrutar como uno más del tema instrumental. Un temazo cargado de guitarra, que tuvo momentos más relajados, y otros de apabullantes solos provenientes de las manos de Willy, que señóras y señores, por si no ha quedado claro, es un crack en todo el sentido de la palabra. Fue de lo mejorcito de la noche, poder disfrutar de estos tres monstruos, Rubén, Ángel y Willy, gozándoselo a lo bestia allí arriba. Momentazo. Me encantan los dedos del maestro Gascon, esa velocidad, esa técnica,…, asombroso.

Line of Fire nos dejo patidifusos y atrapados en la línea de fuego, o de melenas más bien. Las largas melenas de los madrileños que asistieron al concierto eran casi infranqueables y había que andar con ojo para hacer las fotos, pero ya sabéis,  la vida del Heavy es muy dura. Excepcional trabajo, al igual que en Winds Of Time, donde Jorge clavó los registros y bordó sus partes.

Y que decir de Phantom Of The Opera. Os lo podéis imaginar. Eso fue una auténtica fiesta ochentera. Hasta los parches de los chalecos cobraron vida para aquella ocasión. Y los STEELHORSE no la desaprovecharon. Impresionante la versión de Iron Maiden con la que nos deleitaron. Chapeu.

El final iba acercándose, al igual que sus himnos, aún si cabe, más heavies. Al grito de ¡Levanta tu puño!, pero en inglés, Raise Your Fist, acudimos todos a la llamada del Metal. Un tema como pocos, capaces de hacerte levantar el corazón (y en este caso el puño), y arrodillarnos ante estos nuevos Gods Of Thunder, desbancando de su trono al mismísimo Thor. Pero esto no era todo. El poder salvaje se adueñaría de nuestras almas con Wild Power, que ya fue la apoteosis máxima, el sumum, la bacanal, el éxtasis, el orgasmo, una verdadera orgía de HEAVY METAL a la que solo la faltaron las bailarinas sexies. El clímax absoluto.

Una hora de concierto llevaban ya, cuando se despedían. Pero no les sería tan fácil dejar sus instrumentos, aunque tampoco les costo demasiado. Sin estar en el setlist, con lo que no estaría tan ensayada, nos dedicaron al público asistente la grandísima Stand Up And Shout del inconfundible dios del metal, Ronnie James DIO. Un verdadero regalo y un final de fiesta que no pudo ser mejor.

Que más puedo decir, creo que ha quedado muy claro que fue la peripocha y si me permitís la expresión, fue la puta ostia. Esto es HEAVY METAL en estado puro y estos chicos lo hacen como nadie. Jorge tiene una voz acojonante y unas poses Halford sobre el escenario que son demasiado. De Willy creo que ya he dicho todo y me habré quedado corto. Ángel es el hacha del grupo con esas herramientas de cuatro cuerdas marcando en todo momento a la perfección el ritmo. Y Rubén, que nos termino el pobre medio desnudo detrás de su batería, hizo una labor digna de elogiar.

¡CHICOS! Sois muy grandes. Disfrutadlo y haced que el metal corra por las venas de todo el mundo.

Desde aquí y de parte de todo el Subterraneo Heavy, agradecer a toda la banda el trato que ha tenido con nosotros y el que recibimos ese día de su parte. Sois muy buena gente. Y como no, he de mentar a toda esa Metal Crew que se desplazo desde Madrid al concierto. Desde Unai, al gran Pedro del TYRANT (Andres Mellado 29, Bajos de Argüelles, Madrid), que en cuanto pueda, marcho escopeteado a tomar unas birras bien tiradas allí contigo; y al resto de gente con la que seguimos la fiesta en el CONTRAPUNTO (Fernan Gonzalez 18, Burgos).

Saludos del Metal!!