Raquel García (Rockin’ Ladies) – Entrevista – 28/12/2018
Nos tiene rodeadas.
Desde el momento en que adornamos nuestros cuartos con posters de nuestras bandas favoritas hasta las noches tranquilas en que hojeamos un libreto del disco que escuchamos. Está ahí cada vez que abrimos la crónica del concierto al que fuimos la semana pasada. Decora pasivamente una crítica que deja a la altura del betún a un disco escasamente trabajado. La fotografía siempre está acompañándonos de una u otra forma, y es reconfortante verla a nuestro alrededor. Si sabemos observar un retrato profesional de una banda quizás podamos conocer algo más de ella, ya que al fin y al cabo es un recurso más que, bien empleado, puede complementar lo que ese grupo quiere expresar con su música.
Conocimos a Raquel García por su iniciativa Rockin’ Ladies, que no complementa a ninguna formación concreta sino a todo un panorama masculinizado: el rock y el metal. Después de conocer este proyecto y ver el resto de su trabajo aprovechamos la oportunidad para ser las primeras en hablar con esta profesional que ha sido capaz de retratar la vergüenza que deberíamos sentir si no conocemos a ninguna de las músicas a las que ha fotografiado ni podíamos nombrar a una sola fotógrafa involucrada en el terreno metalero antes de comenzar este párrafo.
Subterráneo Webzine: Empecemos por algo sencillo. ¿Cuánto tiempo llevas detrás de las lentes? ¿Qué equipo tienes actualmente?
Raquel: Bueno, haciendo fotos con intención artística, pensando a quién le hago la foto, con qué estilismo, localización… mucho (risas). Desde los catorce años. O sea, llevo más de veinte años disparando… Claro que no estudié nada hasta años después.
Empecé con una Ricoh analógica de los años 70 que era de mis padres, luego pasé a Nikon, cuando salieron las digitales tuve primero una Sony compacta y luego ya salté a Canon, donde sigo. Trabajo con una EOS5D Mark II, que tiene sus años. Pero al final, como digo siempre, la flecha la tira el arquero, no el arco.
Subterráneo Webzine: Hemos podido apreciar tu trabajo con distintas bandas en fotografía de conciertos o promocional, pero ni mucho menos es lo único a lo que te has dedicado. ¿Qué tiene para ti esa combinación de música y fotografía que no puedas encontrar por ejemplo en retratos o trabajo con paisajes?
Raquel: Bueno, yo soy esencialmente retratista, lo supe desde el primer momento. La fotografía de bandas es retrato. Los paisajes me encantan pero sinceramente no son lo mío; me pierdo en espacios tan grandes. Cuando alguien me dice que le encantan mis paisajes lo primero que pienso es… vaya, pocos paisajes buenos debes haber visto si te gustan tanto los míos (risas). De hecho, incluso la mayoría de mis retratos son bastante cercanos.
Acabar combinando música y fotografía no fue premeditado. Pasó. Me gusta hacer retratos y conozco muchos músicos, así que al final me lo empezaron a pedir, y bueno… en mi vida la música es omnipresente, así que se encarriló todo de forma bastante natural. Supongo que no hace falta explicar que es lo que más me gusta hacer. Además, retratar a varias personas a la vez, que todos salgan bien, no caer en fotos tipiquísimas… es un reto, y eso está bien porque te obliga a tratar de superarte cada vez.
Subterráneo Webzine: ¿Cómo llegaste a trabajar con grupos de metal? ¿Es el panorama al que querías llegar o estás en él de paso?
Raquel: Yo he escuchado metal toda la vida, desde antes incluso de empezar con la fotografía, así que el grueso de mis amigos y conocidos pertenecen a ese mundo. En los 80 en la tele teníamos lo que se llamaba “minutos musicales”, videoclips para ajustar los espacios entre la programación, y claro, en los 80 había muchísimo heavy. Me acuerdo de la primera vez que vi el «Can I play with madness» de IRON MAIDEN y pensé «¡Hostia! ¡Esto!«.
Trabajar con grupos de metal, ya sea haciendo fotos o videoclips, me permite conocer en profundidad lo que a ellos mismos les ha llevado a componer un disco, su significado, lo que para ellos representa. Es un lujo por el que nunca podré estar suficientemente agradecida. Y, como te decía, es mi entorno habitual, así que para mí estar donde estoy es perfectamente natural.
Subterráneo Webzine: Para quienes no sepamos nada de este mundo, ¿cómo planificas una sesión con un grupo? ¿Lo escuchas antes? ¿Te limitas o te limitan a seguir órdenes o intentas aportar siempre un toque personal más allá de lo puramente técnico?
Raquel: Pues siempre que puedo me preparo muy bien la sesión. Quiero saber de antemano de qué van las letras del disco, lo que significan para ellos, qué tenían en mente cuando lo compusieron, en quién se inspiraron (si es que lo hicieron). Voy a algún ensayo para ver y oír de primera mano todo, sentir yo misma qué me transmiten. Otra cosa que les pido es que me pasen fotos de sesión que les gusten. No para imitarlas, sino porque así veo qué tipo de tonos buscan, que tipo de iluminación… Habitualmente los músicos no tienen conocimientos sobre el mundo de la imagen y les cuesta mucho explicar el feeling que quieren transmitir, y al final es cierto que una imagen vale más que mil palabras.
Subterráneo Webzine: Nos sorprendió conocer el proyecto Rockin’ Ladies que, para quien aún no lo conozca, trata de visibilizar a la mujer en el rock y el metal. ¿Cómo surge la idea de dejar una huella fotográfica de la existencia de músicas de rock y metal? ¿Qué te motivó a ello?
Raquel: Bueno, esto da para un libro, creo (risas). Voy a resumir todo lo posible. Hubo varios detalles que fui observando que en conjunto me llevaron a hacer este proyecto. Primero algunos comentarios de Facebook, gente rajando de qué había conseguido según que banda formada solo por chicas, y que lo habían conseguido solo por ser chicas… (en este país la envidia y los haters… en fin…). Luego observar carteles de festivales y ver tan pocas mujeres en los escenarios. Yo misma llevo toda la vida yendo a infinidad de conciertos, festivales… Muy pocas veces he visto chicas ahí arriba. La brecha de género en la música es evidente, pero en los estilos más “durillos”… bueno, es que es ya increíble.
El underground es duro para todos, te pagas tus instrumentos, tus clases, el alquiler de tu local que a menudo ni siquiera te queda cerca de casa. Inviertes infinidad de horas, dinero en fotos, vídeos, estudios, diseños… sabiendo que nunca le vas a sacar rendimiento (para mí no es lo principal, pero estaría muy bien que estos artistas le sacaran un poco más de beneficio al asunto). Pues todas esas dificultades se multiplican cuando eres una chica. No siempre es así, ¿eh? Hay gente super válida que no hace la más mínima diferencia según tu género. Pero a raíz de ir avanzando con el proyecto me han ido contando anécdotas que me han dejado sin saber qué decir. También me han contado experiencias super positivas.
La competitividad (algo en lo que no creo para nada, por cierto) es algo que parece que tenemos grabado a fuego, y precisamente por esto me parece super bonito el haber ido observando, a medida que avanzaba el proyecto, el compañerismo y apoyo que en el sector femenino se brindan unas a otras en la música. Es emocionante. Siempre he pensado que se llega mucho más lejos compartiendo y colaborando que compitiendo, y últimamente estoy teniendo más clara que nunca esta idea.
Hay gente que dice que ahora solo por ser chica te dan más facilidades en la música. Parece ser que el hecho de que estemos renunciando a mantenernos en un segundo plano, y que además haya gente entre el sector masculino que lo celebre y nos apoye, levanta ampollas en más de uno… Pues que se vayan acostumbrando. De hecho, para mí personalmente que haya más chicas en la música no trae más que beneficios. Es más gente haciendo música, ¡más música a descubrir y disfrutar!
Subterráneo Webzine: Sabemos que es un proyecto personal, pero eso no quita que sea amplio, costoso y ambicioso. ¿Cuentas con colaboraciones de otras personas que te echen una mano en algún aspecto?
Raquel: Pues sí, es muy costoso, muchísimo, y una gran parte ha salido ya de mi bolsillo. Para poder costearlo inicié una campaña de venta de camisetas que ha ido bastante bien, pero que aún está muy muy lejos de poder llegar a costear todo lo que queda por hacer.
Este proyecto me obliga a desplazarme por diferentes ciudades, alquilar estudios, buscarme alojamiento y mantenerme. Ahora me he asociado con la Frikifactoria para llevar la campaña, ya que hasta ahora lo que hacía era una campaña pre-order, y cuando la cerraba enviaba el pedido a la empresa de serigrafía y luego las empaquetaba y enviaba. Este proceso obliga a los que han comprado la camiseta a esperar muchísimo, y a mi me daba un montón de trabajo, tiempo del que no dispongo ahora mismo para nada. La gente de la Frikifactoria me ha ayudado una barbaridad y además me han ofrecido más tipos de productos. Así que si alguien quiere colaborar de algún modo, aquí tenéis todos los productos disponibles:
https://www.frikifactoria.com/tienda/rockinladies/
Si queréis apoyar el proyecto, podéis comprar merchandising ahí.
Subterráneo Webzine: Cuando anunciaste el proyecto en redes sociales comentaste que hiciste una gran labor de investigación para encontrar mujeres en el metal y rock nacional, ¿cómo fue ese proceso? ¿Hubo algo que te sorprendiese encontrar?
Raquel: Sí, sí, fue tremendo (risas). Al tener tantos músicos de contactos en Facebook, me repasaba las sugerencias de amistad, o en grupos dedicados a música pues miraba quién había. A la que veía una chica que llevaba una foto de perfil con un instrumento, la agregaba y le escribía por privado para explicarle. Y claro, cuanta más gente contactaba, más sugerencias de amistad de este tipo… ¡y me di cuenta de que eran un montón! Muchísimo más de lo que hubiera esperado. Fue sorprendente.
Después al hacerse más conocido el proyecto también empezó a contactarme gente de todo el país, ya sea chicas directamente o bien chicos haciéndome sugerencias… Me sorprendió no solo la cantidad de mujeres en la música que había, si no el apoyo recibido. De verdad que no esperaba que tanta gente creyera en mi proyecto, es gratificante y da un poco de miedito a la vez.
Subterráneo Webzine: Imagino que cualquiera que se embarcase en esa búsqueda de “rockin’ ladies” españolas podría concluir que hay mujeres en muchas bandas, pero que por algún motivo no son tan visibles como los hombres. ¿Han cambiado tus pensamientos a este respecto desde que comenzaste el proyecto?
Raquel: A ver, cualquiera que se haya interesado un poquito por la historia del arte sabe que la mujer ha estado relegada a un segundo plano desde siempre. Esto es así guste o no. Sigue sucediendo, y no va a cambiar si nosotras mismas no nos apoyamos y trabajamos duro para conquistar nuestro lugar.
La mayoría de las personas son muy competitivas, pero creo que al ser un sector de la sociedad históricamente marginado, hemos aprendido a colaborar más entre nosotras. Esa es nuestra gran baza y creo que vale la pena fortalecerla. Como he dicho antes: más compartir y menos competir.
Subterráneo Webzine: Vas viajando por toda España buscando a las víctimas de tu objetivo; recientemente has sacado unas camisetas estupendas diseñadas por Helen Sotillo para financiar el proyecto. Entiendo que por el momento no es algo destinado a una explotación económica y no sé si en algún momento lo será, pero me gustaría saber más acerca de los gastos que te conlleva esto. No tanto datos económicos sino todo lo que se refiere al tiempo, energía invertida, búsqueda de recursos, resultados… ¿Cómo se gesta un proyecto DIY como el tuyo?
Raquel: “Víctimas de mi objetivo” (risas), me ha gustado eso. Bueno, como explicaba antes, lo medio costeo con esas camisetas. Un amigo de una banda me dio la idea de las camisetas, contacté con Helen, le expliqué mi idea para el diseño, y claro, como es una catacrocker total lo pilló ipso facto, como si me hubiera leído la mente.
Helen me ha ayudado muchísimo a enfocar toda esta parte, incluso con la tienda online en Ecwid que abrí. Yo soy fotógrafa, no tengo un negocio de camisetas, por lo que no tengo idea de seguir vendiéndolas cuando esto acabe. Mi idea era y sigue siendo hacer esto para sustentar el proyecto, nada más.
Subterráneo Webzine: Sacar a relucir a las mujeres del mundo de la música es una tarea que podría llegar hasta el infinito y se me ocurren muchas formas en las que podría tomar forma esta iniciativa además de la exposición fotográfica en la que esperamos poder disfrutar de todas estas fotos. ¿Dónde te gustaría a ti que llegase si dispusieras de todo cuanto necesitases? ¿Cuándo habrá cumplido Rockin’ Ladies su propósito?
Raquel: Rockin’ Ladies es un proyecto al que algún día tengo que echarle el cerrojo, porque no me puedo pasar la vida haciendo lo mismo, pero en sí mismo no acabaría nunca. Siempre habrá mujeres cañeras por fotografiar y es por tiempo y dinero imposible que yo siga desplazándome por tiempo indefinido por toda la geografía para tenerlas a todas y cada una de ellas.
Eso es una muestra para poner de manifiesto una realidad, no un censo. Para censo ya tenéis a Vane Balón de Distrito Uve que se ha pegado la macro currada de la vida.
Subterráneo Webzine: Permitiéndome volcar una opinión personal en una entrevista, creo que hay que reconocer el arrojo de alguien que observa una situación de desigualdad y se lanza a visibilizarla mediante un proyecto artístico. ¿Cómo podemos las demás contribuir al espíritu de Rockin’ Ladies? ¿Qué puede hacer cualquiera que nos lea para poner su granito de arena y visibilizar a quienes no se ve tanto?
Raquel: Muchas gracias (risas). Siempre he sido una amante de las “causas imposibles”, y me cuesta quedarme inactiva ante una situación de injusticia. ¿Queréis contribuir a esto? Perfecto.
Cultivad la empatía, es la base de todo. Tratad de juzgar menos y de permitir que los demás sean lo que son o lo que tienen la capacidad de ser. No odiéis, y ayudaos entre [email protected]. Ayudaos mucho y siempre que sea posible. Aplicadlo en la música y en cualquier otro aspecto en general. La vida puede ser muy dura, pero vale la pena ser vivida. ¿Qué es lo peor que puede pasar si somos más humildes y empáticos? ¿Que el mundo sea un lugar mejor y más amable para todos? Qué putada, ¿eh?
Subterráneo Webzine: No puedo terminar la entrevista sin pedirte alguna recomendación de bandas que hayas descubierto en este camino y fotógrafas que te inspiren, enseñen o que te hayan dejado huella. Aparte de regalarte los últimos renglones y agradecerte tus palabras.
Raquel: Mira, bandas, muchas… No puedo ponerlas a todas, ni quiero dejarme a ninguna, pero sí que me gustaría mencionar a SUEVICHA, banda de Madrid que tiene una calidad humana excepcional y que pasaron de colaboradoras a amigas, me han apoyado y enseñado una barbaridad. También SWAMPIG, donde su cantante y su batería son gente fenomenal, Rebeca me ha ayudado lo que no está escrito, ¡y tiene un sentido del humor que te espatarras! DEVIL IN YOU de Sevilla, que sin su cantante Marta (y Maite) me hubiera hundido en la mierda profunda cuando estuve allí (risas). Paris Lakryma, batería de LA CALLE DEL RUIDO, que ha sido mi fellow partner in crime para tantas cosas. Raphaella de ANKOR, super actitud, y es que es una genia en la música esa chica, en serio, una pasada… Y un largo etcétera. No puedo ponerme a nombrar todas las bandas que he descubierto y que han sido un ¡hostia! como una catedral.
En cuanto a fotógrafas Nat Enemede de Madrid, Marisol Huertas de Alicante o Irene Serrano de Barcelona, o Soraya Moon de Euskadi… ¡Son unas máquinas! Pero ya no solo por su trabajo, si no por la actitud general que tienen. Bueno, y Ester Segarra, es mi ídola total, jefa de jefas, catacrockers de catacrokers.
Y me gustaría mencionar también a Unai Endemaño, de Euskadi. Aparte de ser la simpatía y positividad con patas, curra lo que no está escrito, y tiene un proyecto que nos apoya que se llama Rock and Roses, con fotografías de mujeres rockeras y metaleras en directo. Lo va exponiendo por varios lugares y si podéis ir a verla, hacedlo. Y compradle fotos para que pueda seguir haciendo esto.
Daros las gracias por vuestro apoyo, vuestro interés en el proyecto, y en lo que yo tenga que contar. Yo estoy muy acostumbrada al anonimato y se me hace raro, pero si sirve para un bien común, pues habrá que dar la cara. ¡Un abrazo grande!