EVIL RISE – … In War and Hate, 2011
Y llegó el esperado, al menos por mi parte, primer largo de los salmantinos EVIL RISE. Ya en 2010 nos regalaron un pequeño adelanto del álbum, en forma de cd promo, con tres canciones, que nos puso los dientes bien largos. Para cualquier amante del heavy metal old school debería ser así, y así sucedió conmigo.
EVIL RISE lo compone el polivalente y activo músico Óscar Gómez Comendador, principalmente conocido por su otro grupo, MIND HOLOCAUST, y también por su trabajo con THIRST OF REVENGE o su paso por LLVME. Y Sarah G.V., a las voces. Ésta, con un estilo personal que particularmente me agrada, y que bebe de influencias como la de Kimberly Goss (SINERGY) o DORO, se encarga de toda la parte vocal, mientras que el primero se ocupa de toda la labor instrumental, excepto de la batería (trabajo de Koko, a quien el grupo fichó el año pasado para poder ofrecer sus directos)
Atendiendo a las influencias citadas de Sarah Evil, y habiendo escuchado la promo un año antes, ya el oyente puede saber de antemano por dónde van los tiros. Sí, esto es heavy metal clásico, con trazas de otros estilos, que no hacen más que enriquecer el producto final. Hablo de detalles que pueden provenir de corrientes musicales como el thrash o doom más clásicos, que no dejan de ser eso mismo: ínfimos detalles o rasgos que no definen el resultado final, pero que lo enaltece.
No obstante, esto es heavy metal 80’s, además con una producción típica de tantos y tantos discos de aquella década, maquetera y nostálgica para algunos, aunque aquí he de ser especialmente crítico con el resultado final, ya que en mi opinión el sonido de las demos era mejor, y esto precisamente me deja un sabor agridulce.
Con otro sonido quizás el disco apuntara al top ten de discos nacionales del año, ya que en él hay composiciones realmente fantásticas, como la intro inicial más el corte que da título al disco (In War and Hate), o At The House of Pain, temas incluidos en el adelanto de hace un año, que retrotraen al oyente a la década dorada del género. O Red Sun, con una oscuridad propia del black, lóbrego y sombrío, o Metal Seeds, donde Sarah brilla especialmente.
Atmósferas muy bien conseguidas envuelven al oyente bajo un manto de oscuridad, a la vez que melódico, en todos estos temas, al igual que en My Hope o Run or Walk, con unos riffs simples pero efectistas a cargo de Óscar. Evil Rise, por su parte, baja el listón pero predispone a la escucha del corte más complejo del disco: el final Evil Dies, donde el grupo muestra su faceta más virtuosa y variada, con ese alma diabólica que desprenden los trabajos de KING DIAMOND.
Interesante disco que gustará sin duda a los metalheads más clásicos y que gusten de sonidos old school. Esto es …In War and Hate, eufonía de los ecos citados atendiendo a sus composiciones, y quizás cacofonía si hacemos caso a la producción. Cuestión de ver el vaso medio lleno o medio vacío… ¿no? Yo me quedo con lo primero.
Los acabo de escuchar y se me han caido literalmente al suelo…. que musica mas guapa de verdad.
la frase «Interesante disco que gustará sin duda a los metalheads más clásicos y que gusten de sonidos old school» se aplica perfectamente en tu caso, Blackant 😀