DISTURWATIO – Disparo, 2009
Burgos es una ciudad de la que me gusta especialmente el ambiente heavy, con salas de conciertos como la sala Berlín (antiguo Close To Me) y garitos de nuestro rollo como el mítico Contrapunto, gestionado por el cantante de los disueltos GRIETA. Pero ahí no queda la cosa, sino que la escena burgalesa goza de muy buena salud en cuanto a grupos, y si con un término me animaría a definir esta escena, sería con «diversidad».
Porque hay bandas de todos los estilos, desde el archiconocido, ya no solo a nivel local, BUMPER, hasta los KOBRA, pasando por bandas como MIRADA DE ANGEL, NATURAL WAY, RESURRECCION, ZENTE, MISTER MACHIN, HUSEIN JOHNSON, D13… y muchos más. Entre ellos se encuentra el grupo objeto de esta reseña: DISTURWATIO.
DISTURWATIO nace en 2006 de las cenizas del grupo de punk-rock SANTO PREPUZIO. Y en cierto modo no sorprende ver este estilo reflejado en ellos, aunque ya metalizado, con su primer disco, «Disparo». De estas cenizas el grupo se transforma en SKORTVM, nombre por cierto que no refleja ese sonido sucio y «de la calle» de la banda. Acertadamente apenas utilizaron este nombre y pronto conocimos a los actuales DISTURWATIO.
«Disparo» es un disco de siete cortes de punk rock, barnizado con una capa de pintura metalizada, con influencias hardcoretas, que hacen que sea un cd que puede gustar a fans de grupos como BARRICADA, PORRETAS o los propios ZIRROSIS (de hecho el guitarrista de DISTURWATIO es el bajista de este grupo, aunque entra una vez grabado el disco). No obstante, la música de DISTURWATIO es más cadenciosa y más remisa que la de los grupos antes mencionados. Remisa al menos en cuanto a velocidad, porque la música de «Disparo» es altamente reivindicativa, como no podía ser de otra forma al percatarse del estilo o estilos de estos burgaleses. Y más remisa en cuanto a velocidad porque con un enloquecimiento general de su música podríamos estar hablando de un disco de thrashcore / hardcore. Aun así partes rápidas hay, y se agradecen.
También DISTURWATIO me recuerdan instrumentalmente y en las líneas vocales a los alcarreños NECROBERUS, aunque sus estilos musicales sean bastante distintos.
Todo empieza con una fogata en la cual el grupo intenta hacer arder el «Esquema Social», y es que las letras del grupo son tremendamente reivindicativas. Realmente te retrotraen al ambiente callejero que se respiraba en las calles y en los parques de hace treinta años, con el pitillo compartido y la litrona pasando de mano en mano. Aquellos tiempos en los que punkies y heavies no podían ni verse. Bien, DISTURWATIO, como han hecho anteriormente otros tantos grupos, aúnan las filosofías de ambos bandos en este primer tema y en «Disparo» en general.
«Ignorancia» es una crítica explícita a la religión en sí. Se pueden apreciar los coros de Emilio (guitarra) secundando al vocalista y bajista Iván. Por otra parte la batería de Miguel, junto al bajo, forma una base rítmica compacta y que cumple.
«Profeta del Metal» es quizás el mejor corte del disco, el más metalizado, aunque quizás peque de algo lineal. Pero ¿para qué los enrevesamientos innecesarios? De hecho la música de DISTURWATIO es simple, pero directa y que va a la yugular. Una crítica encubierta a todos esa gentuza que ve lo nuestro como un negocio y que no siente el metal de verdad.
«Fashion Victim» abre con el bajo de Iván, y no puedo evitar tener un deja vu a lo SUBTERRANEAN KIDS. Dedicado a la gente que solo sabe regirse por las modas. Estribillo muy metal, que es sin duda lo mejor del corte. El bajo tiene más momentos de protagonismo aparte del comienzo.
«Disparo» es el tema que da título al disco, y en este caso empieza no con el bajo de Iván, sino con la guitarra de Emilio, a la que se unen paulatinamente el resto de instrumentos, en el tema con la letra más inspirada y currada de todas.
«La gripe del pollo» es el tema «cachondo» del cd, en el que musicalmente destacan los riffs de guitarra, muy heavies, apoyada en una letra muy punkarra. En mi opinión es el tema instrumentalmente más complejo, quitando un estribillo muy simple, pero seguramente efectivo en los directos del grupo.
Y «Disparo» termina con sonidos de campanas anunciando el «Apocalipsis», último corte del disco, que a estas alturas no nos va a sorprender, y que sigue la línea de todo este trabajo.
Y eso es «Disparo», y esto es DISTURWATIO. Punk rock endurecido, metalizado, con influencias HC que echo en falta en mayor medida, porque en mi caso al menos me quedo con ganas de más velocidad y dinamismo, aunque no deja de ser un disco más que correcto dentro de su estilo. Buena primera piedra de toque. Si con SANTO PREPUZIO estos burgaleses hacían punk rock, y ya como DISTURWATIO con este «Disparo» metalizan su sonido, ¿cómo será lo próximo sabiendo que entre sus influencias se encuentran el hardcore y el thrash? De aquí puede salir algo interesante… El futuro lo dirá. Lo mejor de todo, en mi opinión, es que la música de DISTURWATIO suele pescar en caladeros bastante distintos entre sí, y puede gustar tanto a heavies, como a punkies como a fans del rock urbano. «Disparo» es su pistoletazo de salida.