DARK HORSE WHITE HORSE (NLD) – Dark horse white horse, 2021

Enlaces:

Hay nombres que a uno siempre se le quedan en la memoria y que, de vez en cuando, vuelven a nosotros y nos nace la necesidad de saber qué ha sido de esas personas. Habitualmente ocurre con compañeros del trabajo, un vecino, algún ligue… Pues el nombre que volvió a mí fue el de Marcela Bovio (ex STREAM OF PASSION, MAYA), que allá por 2005 fue una de las voces que más me marcaron y cuyo primer disco de STREAM OF PASSION formó parte de la banda sonora de aquella época. Leí algo de ella por 2018, pero desde entonces le había perdido la pista.

No suelo creer en las confluencias astrales y esas cosas, pero lo cierto es que al meter en Google su nombre lo primero que apareció fue la noticia de que había iniciado un nuevo proyecto gracias al crowdfunding junto con Jord Otto (guitarras) y Ruben Wijga (teclados): DARK HORSE WHITE HORSE, con un sonido entre el progresivo y el sinfónico que me hizo abrir las orejas de par en par.

El hecho de que el proyecto se haya podido sacar adelante gracias al crowfunding me generó sentimientos encontrados, pues me parece un trabajo de tal calidad que no entiendo cómo no ha habido dos o tres sellos importantes que se hayan dado de tortas por tenerlos en sus filas; y por otro lado me dio rabia no haberlo sabido antes para haber aportado mi grano de arena en su momento.

Lo de los sellos discográficos y el crowdfunding creo que debe hacernos reflexionar seriamente, porque no hay que perder la perspectiva de que si no hubiera sido por un puñado de personas que por amor a la música hubiera hecho un sacrificio económico quizás este disco no hubiera existido. Entiendo que no anda el horno para bollos y las discográficas no son una ONG, pero en las empresas del sector cultural debe haber un componente de pasión y fe en su trabajo, porque de lo contrario sólo veríamos libros publicados de tres autores, películas de Pixar y discos de IRON MAIDEN. Si el proyecto de DARK HORSE WHITE HORSE no merecía la pena para las discográficas, apaga y vámonos.

Terminada ni disertación, pasamos a hablar de este excelente disco.

Me ha fascinado desde el primer corte hasta el último compás la tensión que se genera entre la contundencia de las guitarras y el bajo con la voz de Marcela. La parte instrumental suena brutal, tanto en el sentido de contundencia como en la parte técnica. Desconocía a Jord y Ruben, así como a Siebe Sol Sijpkens (bajo) y a Ariën van Weesenbeek (batería), pero me han parecido una máquina perfectamente engrasada. No sé si habían tocado antes juntos, pero suena como si hubieran vivido en la misma cabaña en medio del bosque donde no se podía hacer otra cosas que practicar con sus instrumentos. No vamos a encontrar interminables solos de guitarra o excesivas florituras instrumentales, pero sacan un sonidazo que los cinco temas se quedan cortos…

Aun habiendo un nivelazo instrumental, el trabajo de Marcela merece una mención aparte. Lo que tiene esta mujer en la garganta es de otro planeta, no sé como describirlo… bueno, sí: escuchad el disco y no os fijéis sólo en la voz principal, escuchad los «arreglitos» que se oyen de fondo. No hay colaboraciones vocales; es la misma persona. A ver si de una vez el metal salda su deuda con ella y con este proyecto se pone en el top de cantantes femeninas, porque hay mucha calidad, pero muy muy pocas llegan al nivel que ella muestra en cada uno de los cinco temas. Como muestra, pues «Judgement day«, «Get out» y «Cursed«. Abrumador. Está claro que aquí el papel protagonista lo tiene Marcela, pero es que lo hace tan bien, que no podía ser de otra forma.

Por lo que más queráis, escuchad mucho DARK HORSE WHITE HORSE en Youtube, en el Bandcamp, en Facebook o donde sea para que se difunda lo más posible y que reciban el apoyo que se merecen. Por cierto, disco que va al top ten del 2021. 

Comparte: