BIOLLANTE (FRA) – J’espère que tu danseras quelque part, 2022
Cuando unos artistas tienen un estilo muy bien definido y delimitado, por muy experimentales que sean los resultados, es prácticamente imposible que su particular manera de hacer las cosas no «manche» a otros proyectos paralelos. BIOLLANTE, que coge prestado el nombre de una de las decenas de monstruos que peleaban contra Godzilla en aquellas películas de ciencia ficción japonesas, es el nuevo producto salido del colectivo de NON SERVIAM. Como el colectivo anarquista que son, cuyas caras no conocemos, pero sí sus extremidades, los (supuestos) perpetradores de este nuevo ataque sónico se esconden bajo los nombres de Void y Moon, con la imprescindible colaboración de GOBSCREW.
No tardamos mucho en darnos cuenta que BIOLLANTE cuenta con los mismos elementos que NON SERVIAM, entonces ¿qué lo hace distinto? Algo tan simple como la cantidad y orden de los materiales. Si NON SERVIAM se apoyaba en el black metal, el industrial y en menor medida, el hip hop, aquí se da un interesante vuelco y el hip hop industrial toma el mando, dejando todo tipo de metal como algo más marginal. Como unos NON SERVIAM que han decidido tomar como influencias mucho más serias a DEATH GRIPS o DÄLEK, en lugar de mirar a DODHEIMSGARD o THORNS.
La banda no esconde las similitudes, es más las exhibe con orgullo, llegando a presentar una canción como «Le Monde me revient crié«, que directamente samplea durante su primera mitad a «Il pleut partour derrière«, del último EP de NON SERVIAM. No obstante, queda lejos de ser una revisión de esta y pronto tirará por su propio camino, teniendo al final poco en común con su canción «hermana».
BIOLLANTE sabe muy bien cual es su tipo de público, aquellos que ya toleren de la música del colectivo o el hip hop más experimental. J’espère que tu danseras quelque part es árido y denso, incluyendo el exceso de 20 minutos que cierra el disco bajo el nombre «Porquoi Pas«. Pero ¿qué otro tipo de ambiente puedes darle a temas como el suicidio infantil, las enfermedades mentales, el encarcelamiento y el sistema penitenciario… ? O teniendo en cuenta que esta colaboración surgió a raíz del encarcelamiento de un compañero político y cercano para NS. Uno pegadizo y fácilmente digestible seguro que no.
En general, y prácticamente sin atisbo alguno de melodía o alivio, sobresalen los beats por encima de todo, incluso a par de la voz, con ritmos industriales rozando el noise en algunos puntos, y riffs metálicos.
Tomemos como ejemplo la mencionada «Le Monde me revient crié«. Es uno de los pocos ejemplos de «belleza» existente en el opus, pero en sus diez minutos la melodía principal, aunque perdura, va siendo progresivamente tapada por el trabajo de GOBSCREW, las guitarras distorsionadas, los drones y los gritos. Y si no hemos entendido mal, fue la primera canción que se gestó entre estas múltiples partes.
Pero quizás la canción más interesante, la que mejor refleja toda la naturaleza del disco – o más bien la exagera – es «Pourquoi Pas«, que más que una canción es un papel en blanco donde, a medida que pasan los minutos, BIOLLANTE van improvisando. Así, se generan varias «mini canciones», en las que GOBSCREW hacen suyos unos minutos, secciones de dark ambient/black metal mientras piensan su siguiente paso, clavicordios con conversaciones sampleadas en francés (un sello de identidad del colectivo), o finalizan a través de unos drones inspirados en BLUT AUS NORD.
El debut de BIOLLANTE tiene muchas virtudes, pero también corre el mismo riesgo que cualquier otro producto de nivel experimental alto, y no terminar de «enganchar» al oyente. Un intento premeditado de desafiarnos. Su forma de romper con el sistema establecido, y de cómo debe ser la estructura o el formato de una canción o un disco. Para nosotras han dado en clavo.